Adolfo Suárez, era un hombre del antiguo régimen, no deseado por el Rey, esta harto de Suarez, sus debilidad políticas fueron aprovechadas por la oposición. Si Suarez no dimite a lo mejor el Rey le hubiera echado. Qué quiso decir cuando justificó su decisión de dimitir, el 29 de enero de 1981, y que además la justificara con frases que siguen siendo una incógnita: "No quiero que la democracia sea, una vez más, un paréntesis en la historia de España".
Todavía 30 años despues hay docuemtos secretos, y algunos ni se pueden focopiar ni sacar del Congreso. ¿Por qué Tejero está callado y no dice una sola palabra de lo que pasó, a caso le ha pagado?
Recojo varias opiniones interesantes que se pueden leer en Internet:
El rey, don Juan Carlos, se refiere, por primera vez, al 23-F
(El Rey habla del 23 F).
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Al cumplirse 30 años del intento del golpe de Estado del 23-F, han sido hechas públicas las actas secretas de la investigación sobre la intentona golpista. En ellas, según relata Estrella Moreno, de TVE, se reproducen los télex que durante aquella madrugada envió el Rey Don Juan Carlos al general Jaime Milans del Bosch, responsable de la región miltar de Valencia, para intentar que depusiera su decisión. El contenido del mensaje tuvo mucha relevancia para desbaratar el golpe. Don Juan Carlos, máxima autoridad militar, le decía a Milans que no estaba dispuesto a abdicar ni a abandonar España. Según informa TVE, Don Juan Carlos transmitió a Milans este mensaje: "Cualquier golpe de Estado no se puede escudar en el Rey, es contra el Rey".
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Por qué en su télex del Rey a Milans del Bosch, en el que le confirma la orden verbal de retirada de las tropas y que acate la legalidad dice: "Después de este mensaje ya no puedo volverme atrás", según recoge el sumario. También se mantiene la incógnita sobre una frase que José Oneto atribuye en su último libro al Monarca: "Ni abdico, ni me voy. Quien se subleve está dispuesto a provocar una guerra civil".
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A Tejero supongo que le convencieron para la parte más teatral y comprometida (la toma del Congreso) sabiendo que se trataba de un personaje exaltado, al que ya habían pillado consirando en la Operación Galaxia, y que no tendría reparos en encabezar el aparatoso asalto. Lo que no le dijeron a Tejero era lo que pasaría después del asalto. O no se lo dijeron, o le mintieron. Tejero siempre pensó que se instauraría un gobierno militar, sin tener en cuenta la participación de los partidos políticos. Y cuando Armada apareció por ahí, y le enseñó la hoja de papel con un un gobierno de concentración nacional (con ministros socialistas y hasta alguno comunista), lo mandó a freir espárragos. Tejero se encastilló, en toda Europa se empezaron a difundir las noticias, y supongo que no se estimó oportuno seguir adelante, ya que cualquier gobierno nuevo que saliese, por mucho que fuese de concentración nacional, respuetuoso con la Constitución, y con el visto bueno del Rey, había nacido de un asalto a las Cortes tan bochornoso y cutre. Recordemos que España tenía que cuidar mucho su imagen si quería entrar en la CEE y en la OTAN.
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Es difícil saber cual era el objetivo final de la acción de Tejero aunque la mayoría de los autores lo ven incapaz de llevar a cabo una acción individual. La cuestión es dilucidar si su acción se correspondía con un golpe de timón destinado a crear un Gobierno de salvación nacional con el apoyo de la Casa Real y tal vez incluso del PSOE, presidido por general Alfonso Armada o si se trataba de dar un golpe de estado militar dirigido por Milans del Bosch que acabara con el estado constitucional aprovechando el vacío de poder. Lo cierto es que cuando Armada le comunicó sus planes de que en dicho gobierno hubiera representantes de todos los partidos (incluidos socialistas, comunistas y nacionalistas), recibió instrucciones de no dejarle entrar en el hemiciclo y continuó con el secuestro esperando una sublevación militar de las principales ciudades.
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Por eso creo que, aunque el golpe fue uno, no todos los implicados actuaban juntos. Armada tenía adjudicado un papel tipo De Gaulle, presentándose como el salvador de la situación (asumiendo la parte más blanda del golpe), Milans del Bosch asumía la parte más visual (el impacto de los tanques en la calle era muy efectista), y al pobre Tejero ambos lo tenían engañado. El elefante blanco que él esperaba seguramente era el propio Del Bosch, pero no a Armada, con su lista de ministros de varios partidos políticos.
Al cumplirse 30 años del intento del golpe de Estado del 23-F, han sido hechas públicas las actas secretas de la investigación sobre la intentona golpista. En ellas, según relata Estrella Moreno, de TVE, se reproducen los télex que durante aquella madrugada envió el Rey Don Juan Carlos al general Jaime Milans del Bosch, responsable de la región miltar de Valencia, para intentar que depusiera su decisión. El contenido del mensaje tuvo mucha relevancia para desbaratar el golpe. Don Juan Carlos, máxima autoridad militar, le decía a Milans que no estaba dispuesto a abdicar ni a abandonar España. Según informa TVE, Don Juan Carlos transmitió a Milans este mensaje: "Cualquier golpe de Estado no se puede escudar en el Rey, es contra el Rey".
El exgeneral Alfonso Armada, sobre el 23-F
(Armada negó simpre ser el efefante blanco? Si no era él quien era.
Ahora, lo de hasta qué punto el Rey sabía de qué iba el tema, estoy convencido de que sabía unas cosas, pero ignoraba otras. Está claro que ignoraba que las Cortes se iban a asaltar de una manera tan garrula. Pero está claro también que tenía conocimiento de la iniciativa de dar un giro de 180º, sepultar la caótica administración de la UCD, y encauzar al país con ese gobierno nacional. Y tenía conocimiento porque los dos cabecillas del golpe eran precisamente los dos generales no sólo más monárquicos del Ejército, sino también los más cortesanos y palatinos. Milans del Bosch, perteneciente a una larga estirpe de generales monárquicos, rendía obediencia fiel al Rey, y acató sus órdenes sin rechistar. Armada había sido tutor y profesor del Rey cuando era Príncipe, y antes de asumir el cargo de Segundo Jefe del Estado Mayor, era el Jefe de la Casa del Rey (en 1981 el cargo tenía el nombre no de Jefe, sino de Secretario). Jamás habrían hecho nada ambos generales sin el conocimiento del Rey, y nunca habrían actuado para derribar la monarquía y volver al marco político franquista, sino para robustecerla y fortalecerla.
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el golpe iba contra Suárez y contra la democracia en pleno, es fácil sacar conclusiones:
1- ¿Quién perdía más con el golpe del 23-F?, Suárez y la Ucd dinamitada ya desde dentro por el traidor de Francisco Fernández Ordóñez que se había pasado ya al bando de los socialistas y le habían prometido la cartera de Exteriores.
2- ¿Quién se afianzó enun puesto "hereditario" porque a Franco le salió de las condecoraciones?: El rey
3- ¿Quienes ganaron las elecciones después del golpe de estado?, los chapuceros de los sociatas
Y siguen ganando elecciones a golpe de golpe de estado, así nos luce el pelo.
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Guitiérrez Mellado le echó un par de güevos, y no hubo forma de tumbarle al suelo.
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Creo que es cierto que el golpe fracasó por Tejero,que creyó a pies juntillas que era un golpe de estado en toda regla, fue engañado, como otros militares, sin saber que lo que el gran elefante blanco y los politicos habián planeado dar un falso golpe para afianzar a Juan Carlos.en la corona como salvador,cosa que casí les sale mal,aunque al final el único que consiguio sus propositos fué el elefante blanco,porque ni Armada consiguio ser presidente,ni carrillo una cartera ministerial,los únicos que triunfarón fuerón Felipe y el gran elefante blanco,una vez más se burlarón de los españoles y de muchos militares integros.
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La época de Felipe Gonzalez fué la mejor para el elefante blanco (Armada), ya que Suarez no le permitía ciertas cosas, en la época socialista se le permitió todo, fué cuando más se enriqueció. Todos sabemos de algunos que pagarón por sus fechorías aunque ellos no eran inocentes.Sólo se salvó Prado de Carbajal,ya que el elefante blanco dijo,(a este no se os ocurra tocarlo),es el que le lleva todos sus asuntos sucios.
En todo este embrollo no hay derechas ni izquierdas los dos son culpables por igual.No respetar a los ciudadanos y querer imponer sus politicas y caprichos del heredero del dictador eso fué lo que se pretendió y se consiguio.ahora comienza muy timidamente a salir ciertas cosas no muy loables para todos ellos.
Ni Tejero,ni Miláns del Boss,ni muchos otros son inocentes,ya que podiéron plantarse ante el golpe.Los eligierón por su fanatismo franquista,sin comunicarles la verdad del golpe,si obedecierón fué por que en ello estaba su jefe supremo.
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Los más beneficiado del golpe del 23 F fueron el Rey (fotaleció su posición constitucional) y Felipe González que ganó las elecciones del 82 por mayoría absoluta.
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En cuanto al Rey, hay algunos datos incuestionables: desde luego se utilizó su nombre, así quedó claro esa noche y durante el juicio, algunos jefes militares declararon que pensaban que el Rey respaldaba la operación y por eso en principio la habían apoyado. Pero su actitud demuestra taxativamente con quién estaba: ayudado por Sabino Fernández Campo desarticuló el golpe a base de teléfono. Propuso la creación de un gobierno en funciones con los secretarios de Estado y subsecretarios, llamó a los capitanes generales para indicarles que él no estaba con los golpistas, al grabar el mensaje de televisión vistió el uniforme de capitán general para dar más fuerzas a sus órdenes de no aceptar el golpe y cuando se le comunicó desde el Ministerio de Interior que el general Armada podía ser uno de los golpistas, no dudó en ordenar que se actuara en consecuencia a pesar del profundo afecto que sentía por su antiguo preceptor y secretario de Su Casa.
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Los defensores del golpismo duro con todas sus consecuencias se rebelaban contra una situación que consideraban intolerable: un Estado autonómico que llevaba a la ruptura de la unidad de España, legalización del PCE y falta de contundencia en la lucha contra ETA, una organización terrorista que provocaba un goteo insoportable de víctimas mortales. Frente a ellos, los que propugnaban el llamado «golpe blando» pretendían imponer un gobierno de concentración presidido por un militar de prestigio, el general Alfonso Armada.
Tejero no estuvo nunca de acuerdo con Armada, Tejero pensó que el "elefante blanco" era Milans del Bosh.
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¿QUIÉN ERA EL ELEFANTE BLANCO? Alfonso Armada, a quien muchos, incluso los protagonistas del golpe, señalan como el elefante blanco, como "la autoridad, militar por supuesto", que anunció el capitán Muñecas a los diputados que llegaría al Congreso para dirigirse a los parlamentarios, aunque él sigue negándolo. Él era, y así lo proclamó a quien le quiso oír aquella tarde, quien debería ser designado presidente de un Gobierno de concentración, que pusiera fin a todos los males que a juicio de los militares golpistas aquejaban a España, entre ellos, y no los menores, el del terrorismo y el del "separatismo", con la aprobación de los Estatutos del País Vasco y de Catalunya.
Armada lo niega ahora, y sigue manteniendo, como hizo en el juicio, que él fue al Congreso a buscar una solución. Pero todos los testimonios apuntan a todo lo contrario. El propio José Gabeiras, teniente general que era jefe del Estado Mayor del ejército en aquel momento, es decir, jefe inmediato de Armada, reconoce que él se presentó aquella tarde en el cuartel general, a todos sus subordinados, como ese futuro presidente, aunque otros sectores del ejército han apuntado a De Santiago y Díaz de Mendívil, como el verdadero elefante blanco, que esperaron en el Congreso y que nunca llegó.
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EL PAPEL DEL CESID. La participación de los servicios secretos de información o de algunos de sus agentes en el golpe de Estado del 23-F es algo que dan por hecho desde los implicados en la operación, como Juan García Carrés, hasta los que lo sufrieron. Los afectados son los únicos que lo niegan. Las sospechas sobre posibles connivencias de miembros de los servicios de inteligencia con los golpistas fueron tan fuertes después del 23-F, que el entonces secretario general de los servicios secretos, Javier Calderón, a quien luego Aznar nombraría director del centro, y a quien se ha llegado a señalar como posible implicado en la trama, aunque nunca pudo confirmarse, se vio obligado a hacer una investigación que se conoció como informe Jáudenes, por el nombre del responsable del documento.
Aunque no concluyente, el informe recoge importantes testimonios de personal del centro de marcado carácter democrático, como los capitanes Diego Camacho y Rubio Luengo, quienes pusieron en conocimiento de sus superiores los datos que poseían sobre la posible implicación directa en los hechos de diverso personal del organismo, especialmente del entonces cabo Rafael Monge Segura, que sería quien condujo uno de los autocares de los guardias civiles asaltantes hasta el Congreso, y quien les dijo que había sido por orden del segundo jefe de la agrupación operativa de medios especiales del Cesid, capitán Francisco Almenta, aunque luego se desdijo. Esta agrupación, conocida como Aoeme estaba dirigida por el comandante José Luis Cortina. Otras investigaciones apuntan a que el Cesid creó a finales de 1980 una unidad especial para ayudar al teniente coronel Tejero conocido por SEA (sección especial de agentes) que dependía de José Luis Cortina, quien pese a haber sido procesado por su presunta implicación en el golpe, fue absuelto.
Tanto Tejero, Armada o Milans de Bosch eran impaces de gar un golpe de estadpo por su cuenta y riesgo. Qué le dijo Milans del Bosh a Tejero, en Albacete, díaas antes del golpe. En conclusión, que los tres se comieron el marrón. Jaime Milans tenía una carrera militar empecable y además era de tradición monárquica. El general Armada habñais dio instructroi del Rey, jamás je hubiera traicionado con un golpe.
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-Mi padre [hijo del general Armda] está continuamente rodeado de gente en el Cuartel General porque empiezan a llegar generales. Todas las declaraciones de éstos en el juicio fueron laudatorias hacia mi padre: tomó decisiones a las órdenes de su superior, el general Gabeiras; llamó a Milans, a los capitanes generales y al coronel del regimiento del cuartel de Campamento, que era amigo suyo y que había tomada RTVE, para que se retirara. Cuando habla con Milans, y ello figura en el sumario, le dice que aquello era una barbaridad y esas frases se las oyen decir a mi padre quienes estaban a su lado esa tarde. Llegó un momento en el que se decide que hay que ir a parlamentar con Tejero. Llaman al Congreso y Tejero dice que como vaya el general Gabeiras le pega un tiro. Entonces Gabeiras dijo: «Alfonso, vete tú». Mi padre llamó a la Zarzuela y habló con el Rey y con Sabino, para ver que podía ofrecer a Tejero para que cediera. Después hizo otra llamada: a mi madre, para despedirse por si no volvía. Yo estaba entonces destinado en Don Benito (Badajoz) y mi madre me telefoneó: «Tu padre va ahora mandado por Gabeiras al Congreso y llamó para despedirse, por si no vuelve». Es decir, la situación no era buena y mi padre iba con cierto miedo. Mi padre va a título personal después de que el Rey le ha dicho que haga la gestión. También le han dado una serie de cosas que ofrecer: un avión, etcétera... No las conozco con detalle. Mi padre se presenta a Tejero como el general Armada, porque no lo conocía, y Tejero no lo recibe como superior suyo que va a hacerse cargo de la situación, sino como alguien con quien va a parlamentar. Lo recibe pistola en mano.
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Para conocer nombres del 23 F: ir a 23 F 30, años después (Entrevista con el Rey donde habló por primera vez del 23 F.)
Adolfo Suárez afirma que si hubiera tenido conocimiento del golpe de Estado, no hubiera dimitido
La dimisión de Adolfo Suárez alberga dudas 30 años después (La Gaceta)
El ex presidente afirmó: “No quiero que la democracia sea de nuevo un paréntesis en la Historia”. Hubo presiones militares y de la UCD. Una cena con la dirección de UCD precipitó la decisión. El ex presidente sólo habló con su mujer antes de dimitir. Suárez pidió expresamente que ese día no le maquillasen.