67º aniversario de la muerte del poeta universal Miguel Hernández.

Conmemoración del Sexagésimo Sexto Aniversario de la muerte
del poeta universal Miguel Hernández.

DESDE QUE TU ORTO- MIGUEL HERNÁNDEZ- por levante
alumbró el estro en tu mente, aún tus desnudas rodillas
coronado de laureles fuiste siendo estudiante,

te llamaste lunático de la noche, amorosamente
la naturaleza, la luna abrió tu cabeza con palabras bellas
te abrazaste a ellas, el cielo te hizo perenne vigilante:

inteligencia y voluntad para ayuntar palabras
inverosímiles metáforas sembradas a los vientos;
(entre tanto a los árboles se encaraman las cabras).

Los verdosos ojos- a tus amistades- espejos del alma; aventuras
y cultura, por los pueblos de España Misiones Pedagógicas:
aportan ilustres amigos, nuevas y femeninas compañeras.

Fatalidad de Sijé:... hermano muerto, al que no pudiste besar
la frente antes de su enterramiento. Editado tu inefable: (insólito tratado amoroso)de metáforas sublimes, El rayo que no cesa, para embelesar;

estructuras son de sentimientos de ese estadio ardoroso y doliente.
Asesinado Lorca: V Regimiento; Residencia de Intelectuales y primera línea, arengas; ráfaga nefasta al pecho en tu amigo... de la Torriente.

Mil novecientos treinta y siete, tu gran año henchido de ventura:
Solsticio nupcial, mieles, lunas, soles... en la tierra natal de tu
jaenesa Josefina – tu poesía bélica, tornas en vivencias íntimas, con ternura -;

intervienes en Valencia en el II Congreso Internacional de Escritores Antifascistas; homenajeado en El Ateneo de Alicante; viajas
a Rusia para el V Festival de Teatro Soviético con visita a capitales

europeas; ven la luz tus: Viento del pueblo, Teatro en la guerra,
Pastor de la muerte; borda el año: tu primogénito Manuel Ramón.
Creas Cancionero y romancero de ausencias: en un “turismo” que aterra.

No sólo lloramos la deleznable manera que te dieron... de morir,
sino que - encolerizados por los hechos - loamos tu penosa vida:
Cuatro meses postrados tus huesos en un hediondo jergón. ¡Qué sufrir!,

con el volcán de las tifoideas y el perro que muerde las entrañas del pecho
afluyendo a tu boca la sangre: ¿Quizá un vil rencor, te punzó la herida?.
Millones de puños cerrados por ti, exigen –con razón- el derecho:

que sea revisado el proceso falaz; y sea tu honor exculpado;
mas tu persecución, interrogatorios, violencias padecidas, dolores,
ni un instante robado de tu libertad: ¡Quedará de las gentes olvidado!.

Manuel-Roberto Leonís, Orihuela, 28 de marzo de 2008.