Presentacion en Nerja del libro "Palabras trenzadas" de Vicky Fernández y Lucía Muñoz
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Presentación de Lucía Muñoz
Muy buenas noches.
En este día tan especial para mí, voy a comenzar agradeciendo, a la concejalía de Educación y Cultura del excelentísimo ayuntamiento de Nerja y a su concejala Angélica Portillo por su colaboración, apoyo e interés para la publicación de este libro y por cedernos la Sala Mercado, que desde hace unos días nos deleita con las fotografías de este joven artista nerjeño, José Miguel Ortuño.
Quiero dar las gracias especialmente a José Alberto Armijo, nuestro Alcalde, por la confianza, interés y apoyo incondicional que siempre me ha brindado. Pues más allá de sus obligaciones, trabajo y compromisos como alcalde de Nerja, hoy me está demostrando su amistad con su presencia en este acto tan importante para mí y para la cultura de nuestro pueblo de Nerja.
No quiero dejar de saludar y agradecer también la presencia del resto de la corporación que fueron compañeras y compañero míos y a los que me une un gran afecto y amistad.
Gracias Ildefonso, querido amigo y compañero de la asociación la aventura de escribir, eres un gran poeta, y hoy con tu magistral presentación nos has regalado tus bellas palabras llenas de sensibilidad, poesía y amor.
Gracias infinitas a mi esposo Antonio, o como diría Elvira Lindo, mi santo, que cuando son ya las doce de la noche y me ve sentada tecleando frente al ordenador, se acerca con un plato con fruta y me dice: Quieres dejar de quemarte las pestañas con la pantalla del ordenador, y despedirte ya de esos personajes tuyos y ¡come algo, que así como vas a engordar!
Gracias a mis queridos padres, Antonio y Mari Loli, a mi hermana Anabel, a mi hermano Antonio y a mis sobrinos, que me tienen loquita, Alba, Antonio y Vanesa. Cada uno de vosotros sois mis amores verdaderos, sois el camino trazado de mi pasado, mi presente y mi futuro y desde luego sin vuestro amor, ayuda, cuidados, consejos y ánimos, estos escritos nunca habrían existido.
Gracias también al resto de mis familiares, a mis suegros, a mis amigos y público en general que habéis venido a compartir la alegría de la presentación de éste “niño moderno compartido”, como yo lo llamo, pues ha nacido de dos madres literarias.
¡Ah! Un último agradecimiento para mi cuñado Plácido, que es un gran escritor que tiene dos novelas publicadas, le doy las gracias por los varios días que dedicó para corregirme mis escritos. Gracias también para Damián, Angel, Francis, Estrella y Miguel Angel, que han estado dispuesto a ayudarme en todo momento y mira que les he dado la lata con las invitaciones, los carteles y con los detalles para que esta noche todo saliera lo mejor posible.
Ahora hablaré de mi trayectoria en la escritura hasta llegar a estas Palabras Trenzadas. Como se suele decir, las musas o la inspiración, me llegó tardía, no fui una niña ni una adolescente que escribiera poemas ni cuentos, pero eso sí, en mi cabeza bullían personajes, mundos paralelos, situaciones y fantasías, pero no era capaz de sacarlos ni de darles vida por timidez o por vergüenza. El caso es que tuve la suerte de conocer a algunas personas que me dieron el impulso que yo necesitaba, y así fue como la escritura vino a mí o yo fui a ella, allá por el año 90, y llegó con pasos torpes y lentos. Recuerdo aquella vieja máquina de escribir Olivetti de mi padre, a la que yo aporreaba inmisericorde cada vez que se me ponía rebelde. La cinta se retorcía como un trapo, las teclas se peleaban entre ellas y terminaban como dos púgiles abrazados en la cancha, y si me equivocaba de letra que era la mayoría de las veces, maldecía, rompía lo escrito o intentaba enmendar el error con típex.
Recuerdo con qué vergüenza y timidez mostré a mi marido y a mis amigos más íntimos mis primero escritos tan llenos de faltas de ortografías y de manchas de típex. Cuántas horas reescribiendo, corrigiendo, y pidiendo ayuda y consejos.
Pasaron varios años y supe de unos talleres de Escritura, me animé, y llamé para asistir. Allí conocí a Ricardo que era quien iba a impartir los talleres, a Chema, Vicky, Ana, Josefina, Haydée, Marisa, Isabel, Maribel y otras cuantas personas ilusionadísimas, que un tiempo después y, de esto hace ya unos 14 años, nos reunimos para fundar la asociación cultural “La Aventura de Escribir”. En estos años ha habido de todo, altos y bajos, ha habido fiestas y despedidas, pero a pesar de ello, la asociación ha seguido adelante, y siempre con la ilusión y el apoyo de una persona que nunca ha dado su brazo a torcer, que nunca se ha rendido y no es otra que nuestra presidenta Haydée Alicia Acosta. Hoy especialmente te doy las gracias Haydée por el amor que le has puesto al escribir el prólogo de estas Palabras Trenzadas, que nos acaba de leer y que me emocionó la primera vez que lo leí ,y hoy ha vuelto a hacerlo.
Puedo asegurar que escribir ha hecho que mi vida tenga una razón de ser más allá de mi propia existencia, de mi rutina del día a día. A través de mis escritos he podido expresar mis sentimientos más íntimos, mis miedos, deseos, ilusiones, fantasías e inquietudes. También me ha servido para denunciar entre otras cosas, injusticias y malos tratos cometidos a mujeres, a niños y ancianos, que se ven abocados a la soledad, al dolor, la incomprensión y el abandono.
Alguien me preguntó hace unos días al entregarle una invitación para este acto, ¿de dónde sacaba mis escritos? Y yo abrí los ojos de par en par, extendí los brazos y le respondí: de la vida, de lo cotidiano, de las conversaciones e historias que pasan de abuelas a madres y de éstas a hijas y nietas, de simplemente un paseo por las calles de Nerja. Por el Balcón de Europa, por las playas y por los caminos hacia los campos.
Escribir es un oficio al que hay que echarle horas, días, meses, años… y les puedo decir, que tras veinte años sumergida en esta aventura de escribir, me han hecho reflexionar y sobre todo comprender, que no sé nada, que cada día debo aprender más y más.
En estas Palabras Trenzadas he intentado recopilar aquellos relatos a los que les tengo un especial cariño, sobre todo por las personas que me inspiraron para escribirlos, otros relatos nacieron en talleres de escritura y en diferentes actividades, realizadas a lo largo de los años con la asociación Cultural La Aventura de Escribir, e incluso algunos han ganado concursos literarios, y me daba mucha pena que no se hubiesen publicado hasta hoy.
Este libro, nació una tarde veraniega de domingo, en el patio de una Teteria de calle Granada, con aromas de canela, menta, cardamomo y anís, a café amargo y batidos de mango, con el azul de un cielo límpido reflejado en el agua de una fuente cristalina, y con la canícula resbalando entre paredes encaladas, helechos y juncos.
Allí le bautizamos con el nombre, de Palabas Trenzadas, le añadimos una cita gracias a Beatriz Vázquez , le pedimos a Ramón Fernández que es el hermano de Vicky que nos hiciera la portada y en ella ha puesto bellos e intensos colores, a dos mujeres que dan la espalda mirando al mar, a las montañas, a tres soles, y al futuro; a nuevos proyectos, a nuevos escritos e ilusiones. Dos mujeres unidas por dos trenzas literarias, dos trenzas de amistad y dos trenzas tan largas como varias generaciones de un mismo tronco familiar que nos une a ambas.
En definitiva, estos escritos son huellas de mi vida, pasada y presente. Y sólo espero y deseo que les guste, y que cuando nos veamos por las calles de Nerja, os acerquéis a mí y me digáis si os enterneció, os sorprendió, o en su caso, me critiquéis para mejorar en futuros escritos.
PORTADA DEL LIBRO: RAMÓN FERNANDEZ "PALMERAL"
Sobre el cuadro de la portada del libro del que soy autor, os puedo decir que pertenece a mi estilo "Intelectualismo" creado por mí, es un estilo donde dejo libertad total a espectador para que interprete lo que ven o imaginan al verlos. En este cuadro en concreto lo mismo pueden ser dos mujeres anónimas unidas por dos trenzas de Literatura, que por cuerdas de instrumentos musicales, ideas, o afinidades familiares. Miran, dándonos las espaldas, a un cielo muy Mediterráneo por los colores puros: rojos, violes, azules, amarillos. La idea surrealista es la de capturar la atención del viandante al pasar por el escaparate de una librería y destaque entre los demás libros. Las mujeres anónimas están de espaldas al espectador pensando en sus proyectos y quimeras y en las fantasías de tres soles: la vida, el amor y la Literatura.
Dos vídeos del acto de presentación (Nerjapop):
